sábado, 16 de agosto de 2014

Notas de limpieza

EN AQUELLOS AÑOS
En aquellos años, dirán las gentes, perdimos el rastro
del significado de nosotros, de ustedes
hasta encontrarnos
reducidos a yo
y todo ese asunto se tornó
estúpido, irónico, terrible:
intentábamos vivir una vida personal
y, cierto, aquella fue la única vida
de la que podíamos dar testimonio
Pero los grandes pájaros oscuros de la historia gritaron y se
sumergieron
en nuestro clima personal
Fueron decapitados en alguna otra parte pero sus picos y alas
se movieron
a lo largo de la costa, a través de jirones de niebla
donde permanecíamos, diciendo yo

Adrienne Rich


¿Soy la que subrayó esas viejas fotocopias de universidad?, ¿la de los apuntes en las libretas medio rotas y abandonadas en algún lugar de la biblioteca?, ¿o la que leyó las copias y libros que hoy ni siquiera recuerda haber leído?, ¿soy la de la hoja de vida?, ¿la "referente" de algo?, ¿la del enfoque?, ¿la de las fotos del álbum familiar?,  ¿la que escribía ensayos?

¿O acaso soy la destinataria de aquella carta dejada junto a una milhoja algunos años atrás?, ¿la "señora" a la que va dirigida la comunicación bancaria?, ¿la antropóloga?, ¿o a la que le regalaron con mensaje de amor la novela aquella de Beauvoir [que paradójicamente analiza la perfidia amorosa]?, ¿la de los sueños?, ¿la que se irá a algún lugar?, ¿la de las fotos de viaje?, ¿la de los correos?, ¿la de las actas?, ¿la que se levanta a caminar por las mañanas?

En días como hoy más vale ser la que toma café, limpia la biblioteca, rompe papeles en desuso y re-ordena los que quizás puedan ser retomados, vaya a saber la vida en qué... nada más que eso, un instante a la vez